Esta semana le hice la entrevista a Juli Santini. Juli es diseñadora de moda y la creadora de una marca que respira personalidad y mucha autenticidad.
Personalmente me encanta lo que hace y creo que su historia es una GRAN inspiración de cómo con trabajo, dedicación y mucha persistencia se puede lograr lo que uno quiere. Realmente una de las entrevistas que más me emocionó y de las que más aprendí, así que espero que te sirva también!
Juli empezó a sus 17 años sin saber coser, sin saber de telas, ni tener plata para invertir en su negocio. Salió a aprender lo que le hacía falta, a recorrer calles y locales y a preguntar lo que no sabía. Salió a crear su negocio.
No se quedó sentada, no pensó que no iba a poder, simplemente empezó. Hoy, 8 años y medio después, vive de lo que le apasiona y toda esa pasión se nota en cada una de las cosas que hace y comparte 🙂
1 – ¿Cómo y por qué empezaste con este emprendimiento?
La verdad es que no hubo un día exacto en que empecé, siempre estuve rodeada de telas. Por un tema económico nos hacíamos la ropa, la ropa de cama, las cortinas, los manteles, todo. Mis dos abuelas se dedicaron a la costura toda su vida, mi mamá creció con eso y me enseñó a usar la máquina de coser para hacer cosas básicas. Nos hacíamos la ropa mirando revistas de moda de la época, sacábamos el molde y hacíamos los diseños que yo elegía.
Obvio que cuando era chica eso no me gustaba, porque veía a mis amigas que se compraban ropa y yo me la tenía que hacer, y no le veía ningún lado positivo.
Una vez que entré en la adolescencia, me daban plata por mi cumpleaños y yo iba y me compraba ropa, porque me había quedado con ganas de toda la vida. Pero me pasaba que no encontraba en ningún lado el estilo de ropa que yo me venía haciendo, que era lo que me gustaba.
Mi mamá me inculcó un estilo de vestiditos, blusita con pollerita, me vestía como a una muñeca y a mi me encantaba! Cuando crecí y me quise comprar esa ropa, me di cuenta que no había en ningún lado algo que me identificara. Así que dije “bueno, me voy a hacer mi ropa como venía haciéndolo”.
Justo en ese momento empezó el boom de las redes sociales (MySpace y otros), así que empecé (casi jugando, porque no me quería dedicar a eso) a subir fotos mías con mi ropa. Además como siempre me gustó el diseño gráfico, editaba mucho las fotos para que se vean lindas. De repente me empezaron a escribir, pedir de usar mis prendas para revistas, producciones… incluso de Japón!
Todo impensado para mi en ese momento. Pero hasta el momento no vendía nada. Todo era redes sociales, imagen, foto acá foto allá, producciones… pero todo jugando; no estaba vendiendo, la ropa era sólo para las fotos.
Hasta que un día empezaron a pedirme de comprar la ropa. Yo no tenía idea cómo hacer para producir varias prendas y además no tenía tiempo, iba al colegio de 7 de la mañana a 7 de la tarde.
Así que me pasaba noches sin dormir pensando “me encantaría cumplir con esto que la gente me está pidiendo, poder vender la ropa, ¿pero como hago? ¿cómo se las mando?”. No tenía idea de nada, tenía 17 años y todo un mundo nuevo adelante que de repente Internet me había ofrecido. No me iba a quedar de brazos cruzados, así que fui al correo que tenía en mi barrio y les pregunté qué tenía que hacer si quería enviar algo, y me explicaron todo.
Darme cuenta que no era tan raro o imposible me permitió soñar un poquito más.
Así que me creé un mail y publiqué, así sin pensarlo mucho, que empezaba a tomar pedidos. Al día siguiente me voy al colegio y cuando vuelvo a la noche tenía 250 solicitudes de personas. Jamás pensé que iba a tener tantas preguntas, así que la puse a una amiga como administradora para contestar. De todas esas preguntas, tuve 54 o 56 pedidos. Estaba justo en plena época de exámenes en el colegio, así que me levantaba 6:30 de la mañana, cosía, me iba a rendir, volvía, seguía cosiendo… tardé 2 semanas, preparé todos los pedidos y no le fallé a nadie.
Descubrí en ese momento que ahí había algo, por más que había vivido toda mi vida haciéndome mi ropa, nunca lo había visto como un proyecto de vida. Una vez que hice esto y la devolución de la gente fue tan positiva, dije “bueno, me parece que me voy a dedicar a esto”. Y así digamos que “de la nada” arranqué.
2 – ¿Cuál fue el mayor desafío que tuviste o lo que más te costó a la hora de hacer crecer tu negocio?
La plata. No tenía un peso, mis papás no tenían un peso. Tuve años muy difíciles en casa, no es algo que ande diciendo, pero no me avergüenza para nada porque supimos salir adelante con lo poco que teníamos.
La verdad es que costó muchísimo y cuando arranqué el emprendimiento tuve todo el apoyo de mi mamá, pero nada de plata. No puedo estar más agradecida, porque sé que hay muchos que no tienen el apoyo en sus casas o que les dicen “buscate un trabajo de verdad”. Yo tuve desde el principio el apoyo de mi mamá, no tenía plata, pero el apoyo lo tenía.
Con lo que tenía ahorrado me las ingenié para comprar tela para todos los pedidos, pero lo bueno es que ya sabía que eran pedidos que tenía vendidos. No es que me estaba arriesgando a invertir sin saber si lo iba a vender.
Eso es muy importante para las que están empezando, no mandarse a comprar por comprar. Es preferible que hagas algo chiquito, a pedido solamente, así cuando comprás ya sabés que lo vas a vender.
3 – ¿Cuál fue la mejor decisión que hiciste? Eso que sentís que te hizo toda la diferencia.
Creo que la mejor decisión que tomé, hace unos tres o cuatro años, fue dividir bien todas las líneas de ropa que hago. Que esté bien diferenciado entre lo que es la ropa comercial y ropa a medida.
La gente al fin entendió que mi ropa estaba a la venta, que no era ropa para ver y poner “me gusta” nada más, o ropa para fotos. Además empezaron a surgir los pedidos de novias, de vestidos de quince bordados, o para eventos.
Esto es muy reciente, porque por muchos años hice algo intermedio entre ropa a medida y algo más comercial. Pero la verdad es que no se entendía bien si era ropa para todos los días, si había que pedirlo con tiempo, si era a medida o cómo funcionaba.
Por eso también en mis publicaciones (subo muchas fotos por día!), trato de publicar siempre algo de lo que es a medida, algo de lo que es comercial, algo de lencería y algo de mi porque también es mi perfil personal.
A partir que hice estos cambios, la marca empezó a funcionar de verdad. Ahora puedo no sólo vivir de mi negocio y mantener la marca, sino también viajar y hacer otras cosas; ser 100% independiente.
Es muy importante además de todo el volar y soñar, bajar a la realidad que si uno no vende, la marca no funciona.
4 – ¿Qué dirías que no puede faltar en un emprendimiento para tener éxito?
La verdad que lo que no puede faltar es identidad. Es muy importante que cada uno busque en su interior qué es lo que realmente le gusta y lo que realmente lo hace ser único.
Una vez que sabés y que te conocés vos, lo que sea que hagas va a ser auténtico, porque uno es uno, no es igual a otro, es imposible que otra persona sea igual a vos.
Es un trabajo que hay que hacer internamente para darse cuenta. No es fácil. Yo tuve un montón de cosas que fueron parte de mi infancia, disparadores de mi estilo, que busco que se vean reflejados en mi marca.
Siempre digo que tengo la suerte que mi infancia me dio, no sólo la fortaleza de superar situaciones difíciles, sino también una identidad muy marcada con la ropa que usaba. Si ves fotos mías de chica, es la misma ropa que hago ahora. Ya tenía ese estilo, no es que lo tuve que inventar, ya era así yo.
Es muy importante hacer un análisis de tu vida interna, de cosas que hayas vivido, no solo de las cosas que te gustan hoy. Aceptarse uno en su totalidad. Ese sería mi consejo, buscarse uno y no olvidarse de quién es.
5 – ¿Qué consejos le darías a otras emprendedoras?
Tener bien claro qué querés vos, hacia dónde vas y trabajar duro para eso, porque nada se da de la noche a la mañana. Hay que armarse de paciencia porque realmente hay que trabajar duro.
Hay muchas cosas que hay que dejar de lado para que funcione, no va a andar solo, hay que ponerle cuerpo y alma.
Si realmente te importa ¡averiguar, aprender, moverse! Yo por lo menos siempre fui muy autodidacta, muy de investigar y aprender cosas, nunca fui una persona que se queda con lo que sabe y ya está. Si algo no sé, investigo, hago cursos, pregunto, lo que sea! Personalmente me inspiro mucho en libros, cosas viejas que me gusta acumular, soy muy de estar en ferias americanas y mercados de pulga comprando cosas, revistas o libros; que leo y analizo. Hay todo un trabajo propio, no es nada bajado de Pinterest y ya!
Está bueno que leas, analices, busques, te inspires, que no te quedes con lo primero que encuentres!
Y por último, mucho trabajo interno para tener seguridad y amor propio. Si eso no está, creo que del otro lado se nota. Por eso para mi el trabajo hacia el interior de uno es fundamental. Una vez que tenés claro eso y tenés claros tus objetivos (lo que sea que te propongas y aunque empieces con nada!), va a funcionar. Lo puedo decir desde mi lugar, que empecé sin nada.
AHORA QUE LA ESCUCHASTE A JULI, TE CUENTO LAS COSAS QUE A MI ME ENCANTAN Y CREO QUE HACEN QUE SU MARCA SEA TAN AUTÉNTICA Y ORIGINAL.
1 – SU ESTILO Y FOCO MUY CLARO
Una de las cosas que más me gustan de las marca de Juli es que justamente tiene el estilo de ella muy marcado y claro. No intenta hacer prendas para complacer a todo el mundo, diseña el estilo que a ella le encanta desde que es chiquita y tiene clientas que se sienten identificadas con ese mismo estilo.
Tiene muy claro quién es ella y su marca, y se mantiene fiel a eso. No trata de abarcar a todo el mundo, se enfoca en ese mundo de mujeres que se sienten identificadas con ella.
2 – EL FOCO EN SUS CLIENTAS
Una de las cosas que Juli me mencionó en la entrevista y que me encantó es su foco en escuchar y preguntar a sus propias clientas.
“Estoy todo el tiempo preguntándole a mis clientas y a mis seguidoras qué les gustaría, qué color. Las hago participar en TODO y eso les encanta y no se dan una idea de lo que a mi me ayudan. Porque soy un ser humano y a veces me pasa que no se me ocurre o estoy dudando o me aburro, y les pregunto.
Es importante esa devolución, es importante darle el lugar que se merece a tu cliente y a tus seguidores, porque sin ellos vos no estás donde estás, esa es la verdad. Y siempre hay que valorarlos antes que nada, porque gracias a ellos funciona o no funciona. Hay que darles el lugar que se merecen”
Esto es CLAVE. Darle lugar a tus clientas para participar de tu marca. No hace falta adivinar qué quieren. Si al final son ellas las que van a decidir si compran o no tus productos, qué mejor que preguntarles.
Interactuar con esas personas que están del otro lado, conocerlas, conocer sus gustos y preferencias. Si aún no estás haciendo esto en tu negocio, acá te comparto algunas herramientas que te pueden ayudar para empezar a ESCUCHAR y PREGUNTAR.
3 – MOSTRAR EL ANTES, DURANTE Y DESPUÉS
Juli no muestra sólo fotos de sus productos terminados, ni está todo el tiempo intentando vender. Muestra las cosas que la inspiran antes de empezar sus diseños, las telas cuando las está comprando, ella terminando o haciendo la prueba de algún vestido y también sus productos finales.
Su marca es mucho más que su ropa terminada. Es todo su proceso creativo, es todo el trabajo que hay detrás de cada una de sus piezas. Muestra todo lo que involucra su trabajo, lo que hace que sus seguidoras se involucren y valoren sus prendas mucho más.
Porque no se trata de una prenda más, en una prenda con muchísimo trabajo, creatividad y dedicación atrás… es una prenda de una diseñadora que le pone cuerpo y alma a su marca.
Pero si ella no lo mostrase sus seguidoras no podrían adivinarlo y sólo verían el resultado final.
“Aprovechar las redes sociales para mostrar no solo las prendas, sino el proceso, el trabajo y esfuerzo que hay detrás. A la gente le encanta saber cómo fue que hice una prenda, cómo llegué a ese diseño, porque quizás compartí una foto de los 60´s con una chica con una pollera que me gustaba”
Compartir MUCHO más que el producto o servicio final que vendas, es fundamental para conectar desde otro lado más emocional con tus seguidoras y potenciales clientas.
Para que se involucren desde el principio sea con tu proceso, historia o personalidad. Para que te elijan por mucho más que sólo tus productos.
4 – SUS FOTOS INCREÍBLES
Desde el día uno que empezó a subir sus prendas a las redes sociales, Juli cuenta que le dedicaba mucho a la edición de sus fotos. Que aprendió a hacerlo porque era algo que le encantaba y podía mostrar sus prendas con otro estilo. Hoy más que nunca eso es clave!!! Sus fotos casi que enamoran 🙂
Todas con una identidad visual bien definida, dentro de una paleta de colores que representan su marca y con muchísima calidad.
Pero no es algo que empezó a hacer ahora porque ya tiene muchos seguidores o porque ya tiene su tienda online.
Lo hizo desde el principio, aún sin seguidores y sin mucha plata, dedicándole tiempo para poder mostrar sus productos de una manera que atraigan y cuenten una historia.
Tu producto puede ser increíble, pero si la forma en que lo mostrás y presentás no lo acompaña, a muy pocos les va a llamar la atención.
Tus fotos son tu primer contacto con muchos de tus potenciales clientes, con lo cual una de las herramientas más poderosas para ayudarte a atraer más clientes o no. Acá te comparto algunos tips de fotografía que quizás te pueden servir.
5 – SU AUTENTICIDAD, HUMILDAD Y GENEROSIDAD
Con Juli hicimos la entrevista por audio y desde el primer segundo que la escuché, me di cuenta lo humilde y generosa que es, y la pasión y dedicación que tiene con su marca.
Una de las primeras cosas que me dijo es que cuando le escriben diseñadoras que están empezando, siempre intenta responderles, porque sabe lo que es estar ahí. “Estás en una balsa en el medio del océano, no tenés idea por dónde arrancar y es muy importante un empujón”.
Esa generosidad de haber empezado de cero y saber lo mucho que cuesta llegar hasta donde llegó!
Hace poquito incluso hizo una feria de retazos, donde ofreció excedentes de cortes y telas que encontró en la casa de su mamá, para ayudar a las diseñadoras que están empezando. “Toda la tela que heredé de mis abuelas y tías modistas que usé para empezar y que hoy en día buscan ayudar a otras emprendedoras”
Personalmente admiro muchísimo su camino, el haber empezado de cero y con muy poco, hasta construir la marca y tienda que tiene hoy. Pero no sólo eso, admiro cómo tomó toda su historia (lo bueno y lo no tanto), sus gustos, las cosas que la hacían “rara” (y única!) y lo convirtió en una marca increíble con mucha personalidad y autenticidad.
Conocerse a ella misma y plasmar todos sus gustos de libros, música, películas, museos, ciudades… todo eso se respira en su marca!! Si vas a su Instagram vas a ver muchísimas más cosas además de su ropa.
Como no hay otra persona que haya vivido exactamente lo mismo y tenga los mismos gustos, ponerle su historia y su personalidad, es lo que hace que su marca sea auténtica y única también.
Espero que la historia de Juli te sirva de inspiración para crear vos también una marca con TU estilo, TU personalidad, TUS gustos y TU historia. Una marca que refleje todo lo que hace que vos seas vos.
Si no lo tenés todavía muy claro, te comparto este artículo con algunos ejercicios que te pueden ayudar.
Eso hará que tu marca sea auténtica, que atraiga a las personas que conecten con esos mismos valores y gustos, y que sea totalmente diferente.
5 comentarios en «[EMPRENDIMIENTOS QUE INSPIRAN] – Juli Santini, una diseñadora con toda la personalidad»
Me encantó la nota. Yo soy diseñadora de Modas y me cuesta muchísimo llegar al público objetivo como si sintiera que los demás lo están haciendo mejor que yo.
Pero como mi styling es la moda casual tallas grandes, y bajo mi perspectiva trato todos los días dar lo mejor de mi, y no copiar y pegar… y un día completo puedo estar pensando en una pequeña colección y luego lo lanzó. Y lo más gratificante es que te digan waowwwww me encanto. No hay nada que se compare que puedes hacer feliz a otra persona. Felicidades por estupenda visión de darnos fuentes de inspiración
Me encantó la nota . Me siento muy identificada y realmente me da energías y ánimo para seguí y enconrar el camino que me lleve a lo que realmente me gusta . Tengo muchas cosas para poner a trabajar y esta nota me animó a hacerlo muchas gracias ! Leila